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lunes, 29 de julio de 2013

30 Ideas para vencer la procrastinación de una vez por todas

¿Estás cansado del hábito de postergar? Si es así, vamos a ver ideas para quitarnos el yugo de la procrastinación.

La
procrastinación consiste en dejar a un lado lo que hay que hacer para sustituirlo por otra cosa más apetecible o sencilla, como ya sabes.

Y nosotros lo que pretendemos es terminar pronto y lo mejor posible con la obligación para concentrarnos después en la devoción.

1. ¡A mover el cuerpo!
Cuando estás sentado la mayor parte del día, las energías se te van por el sumidero y el estado de ánimo, también. Unos estiramientos o bailar un par de canciones bastan para despertar las endorfinas, aunque lo ideal es hacer algo de ejercicio físico de manera regular.
 
2. Recordatorios de apoyo
Si te sirve, puedes configurar alertas en tu ordenador o en tu teléfono móvil para que te recuerden que… ¡tienes que estar trabajando!
 
3. El compañero de fatigas
Si tienes problemas para hacer lo que tienes que hacer, busca a alguien en una situación parecida. La motivación a dúo funciona.
 
4. Compromiso público
Si a alguien le anuncias que vas a realizar un trabajo, esa presión te crea la urgencia de ponerte manos a la obra. ¿No funciona? Espera, que hay más.

5. La creatividad como impulso
Hacer algo creativo a lo largo del día (tu hobby, por ejemplo) afecta de manera positiva a tu estado de ánimo y eso ayuda a la hora de empezar con el trabajo duro.

6. Madrugar
La quietud del amanecer es estupenda para concentrarse y avanzar en las tareas más penosas. Te las quitas pronto de en medio y eso es una alegría.

7. Irse a dormir temprano
Obvio, cuando se madruga. Si eres un ave nocturna, acuéstate cuando te plazca, pero asegúrate de dormir lo que tu cuerpo necesita.

8. Despejar el paisaje

La limpieza da tranquilidad. Dedicar unos minutos cada día a organizar y eliminar lo que está estorbando no es una pérdida de tiempo. Después se trabaja mejor.

9. Desenchufar la televisión
Horas para ver la tele, las justas, que hay mucho por vivir.


10. Ponerse… ¡ya!
Ponte con el trabajo de inmediato: sin pensarlo, sin anestesia, sin excusas ni quejas. ¡Ahí voy!

Una vez trabajando, muchas veces te das cuenta de que no era para tanto.


11. Reservar hueco en la agenda
Si llega una tarea obligatoria, ponle día y hora en tu agenda. Créale una parcela específica donde no quepa otra cosa. ¡Y a cumplir!

12. Acotar el tiempo
Cuando tienes por delante una tarea más larga que un día sin pan, fracciónala, córtala en trocitos. 

13. TU SISTEMA de trabajo
Tú, que te conoces bien, organiza tu horario, tu esquema de trabajo y las herramientas que utilizarás. Crea tu sistema personalizado.

14. La eficaz lista de tareas
La popular lista de lo que hay que hacer puedes incluirla en tu sistema. Motiva bastante ir tachando las tareas concluidas.

15. No revisar el correo electrónico
En todo caso, unos minutos al iniciar o al terminar la jornada, a menos que sea vital para tu trabajo que lo hagas.

16. Desconectarse de las redes sociales
Lo mismo que lo anterior.

17. Monitorear el tiempo

Fíjate bien en qué debilidades te impiden cumplir con tu trabajo para ponerles remedio. ¿Dónde se te está yendo el tiempo?

18. Automatizar
Si existe la posibilidad de programar algo para que se haga por sí solo, hazlo. Esto vale, sobre todo, para determinadas tareas que se hagan con el ordenador.

19. Delegar
No te eches más trabajo de la cuenta encima. Esto se ve, por ejemplo, en la organización del hogar. Plantéate un reparto de tareas.

20. Que suene la música
Un recurso sencillo, tanto para ponerte las pilas como para ayudarte con la concentración.

21. Vencer el miedo
A menudo se procrastina por miedo a hacer mal el trabajo. Es demasiado difícil. Identifica cuál es tu miedo y plántale cara.

22. Huir de la perfección
Libérate de la necesidad de hacer de la tarea una obra de arte. Simplemente, hazla; revisa después los flecos y punto final.

23. El momento presente
Estar en lo que hay que estar, con todos los sentidos puestos en lo que se está haciendo, tanto si se trabaja como si se descansa, puede ser complicado, pero se perfecciona cuanto más se practica.

24. Las metas del día
Cuando comienza tu día, decide qué tareas vas a realizar (que no sean demasiadas) y no te salgas de ahí, salvo que haya un imprevisto.

25. Trabajar menos
El exceso de trabajo es otra razón por la que se procrastina. Si es necesario, libérate de unos cuantos compromisos, obligaciones y tareas.

26. Descansar
También se procrastina por cansancio. Ten claro que quien no descansa, no produce. Por eso, deja de ser un tirano contigo mismo y date tus merecidos respiros.

27. La diversión
Por paradójico que resulte, si no te diviertes y realizas actividades placenteras a diario, serás propenso a hacerlo cuando estés trabajando. Ya sabes…

28. Desconectar

Desconectar del mundo para conectar contigo. Crea tu búnker antiestrés dedicando unos minutos diarios a relajarte olvidándote del ruido exterior. ¿Qué tal 15 minutos de meditación? Es un ejemplo.

29. No a la resignación

Retira frases como: Yo soy así. Soy vago de nacimiento. No puedo cambiar.
Si quieres acabar con la procrastinación, puedes hacerlo. Sólo inténtalo, cuantas veces sea preciso, y ve probando hasta dar con lo que te funciona.

30. Premiarse por lo bien hecho

Sabe a gloria terminar un trabajo pesado. Ya es un premio por sí solo. Pero, además, podrías darte una auto-recompensa proporcional al esfuerzo.
Te lo mereces y eso te motivará la próxima vez que sientas la tentación de aplazar el trabajo.

Fuente: Tus buenos momentos.



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